El cristiano plástico ni para estar en la boca del horno califica
Daniel 3: 16 -18 “ Sadrac, Mesac y Abed-negó respondieron al rey Nabucodonosor, diciendo: No es necesario que te respondamos sobre este asunto. He aquí nuestro Dios a quien servimos puede librarnos del horno de fuego ardiendo; y de tu mano, oh rey, nos librará. Y si no, sepas, oh rey, que no serviremos a tus dioses, ni tampoco adoraremos la estatua que has levantado”.
El cristiano de plástico esta cómodo nada le acontece, dice yo estoy bien tengo salud, trabajo y todo marcha bien en mi casa, el cristiano plástico se pregunta, ¿Por qué si tanto que oran y Dios disque los usa, y porque no pueden estar bien como yo estoy?, así piensa el cristiano de plástico, cuando ve a un hombre espiritual entrar en el horno de fuego. Lo que el cristiano de plástico no sabe es, que el plástico no califica para grandes temperaturas, y esa es una mala noticia, porque sin el fuego no hay purificación, ni crecimiento, es una mala noticia porque si nunca entras al fuego, nunca sabrás que el fuego no te quemara, lo leerás, pero nunca lo experimentaras.
El cristiano de plástico o de barro sucio que aun no se deja moldear bien, tampoco puede entrar al fuego, el horno solo admite dentro de el a cristianos, de metal, o de barro que ya se han dejado trabajar por Dios; Dios no permitirá que un cristiano de plástico se acerque al horno, porque ese será su final, la próxima vez que mires a alguien fiel sufriendo ora por el y no cuestiones su proceso, porque no está ahí por ser peor que tú.
El cristiano que califica para el horno es un cristiano que ha crecido, ha madurado, es un cristiano que ya no pierde tiempo en darle respuestas, ni explicaciones al diablo, el ya esta capacitado para demostrarle con hechos al diablo que está dispuesto a mantener lo que dice y lo que predica, que está dispuesto a entrar al horno. Los jóvenes de esta historia dijeron al rey “no es necesario que te respondamos” en otras palabras ya tu sabes la respuesta y nuestra postura, cuando al diablo conoce tu postura, ya ni la saliva gastas en responderle, es por eso por lo que el horno, no es para cristianos de plástico que con nada se derriten y tampoco para barro sucio no procesado. Bendiciones comparte con alguien.
