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!CUANDO TU ORGULLO PROVOCA QUE DIOS, A TUS ESPALDAS UNJA A ALGUIEN MEJOR QUE TU!



1 Samuel 15:28 “Entonces Samuel le dijo: Hoy el SEÑOR ha arrancado de ti el reino de Israel, y lo ha dado a un prójimo tuyo que es mejor que tú”.

Una cosa es ser reemplazado por alguien mejor porque ya cumpliste con tu llamado con excelencia, y otra es ser removido por Dios y quitado para siempre, porque alguien puede hacerlo mejor que tú y además es mejor que tú.

Una cosa es entregar con honores el trono a quien te reemplazara y otra cosa es que Dios te arranque el trono, la corona y poder y además de eso, por tu orgullo, arrogancia y desobediencia a tus espaldas este mandando a ungir a tu sucesor y para colmo te mande un espíritu atormentador que solo te dejara tranquilo cuando, tengas en frente a tu sucesor, a ese que odias y quieres matarlo. Mas ese es el pago para el orgulloso y desobediente.

La desobediencia y el orgullo no son buenos aliados, aunque estés ungido, con corona y ropas reales, aunque tengas un llamado y seas seleccionado por el mismo Dios, puedes aun llegar al trono y puedes reinar, pero pronto te darás cuenta de que no será por mucho tiempo. Y Esa fue la realidad del primer hombre que Dios selecciono para reinar sobre Israel. Saul era muy capaz físicamente tenia muy buena altura para ser un rey, tenía la talla exterior y la pinta, pero interiormente nunca estuvo listo para esta tarea y le quedo grande no el trono, ni el poder le quedo grande las palabras humildad y obediencia. Lamentablemente para Saul así como apareció de repente también desapareció destruido y descalificado no por Dios, sino por su mismo orgullo y desobediencia, Dios tomo medidas con el a causa de la actitud que se despertó en el rey, pues tan pronto se le dieron las primeras instrucciones quedo al descubierto que no estaba interesado en seguir las normas de Dios, su carácter desesperado lo guio a cometer pecado haciendo tareas que no le era lisito hacer y tomando decisiones que Dios le había prohibido tomar, comenzó a contradecir a Dios, guardando al rey que debía de matar y guardando el botín de vacas gordas que también debía destruir, pero antes a este suceso hiso el trabajo del profeta Samuel desesperado porque Samuel no aparecía. Le pareció a este rey que Samuel y su función eran algo que él podía también hacer, sin pensarlo actúo como que sabía más que Dios y paso sobre la ordenanza Divina. Y es ahí donde la molestia del poderoso se declara en contra del orgulloso y desobediente rey declarándole por medio del profeta Samuel, 1 Samuel 15:28 “Entonces Samuel le dijo: Hoy el SEÑOR ha arrancado de ti el reino de Israel, y lo ha dado a un prójimo tuyo que es mejor que tú”. Desde ese día también el espíritu de Jehová se apartó de Saul, pues desperdicio la oportunidad divina echándola a perder por orgullo y desobediencia, y es que es difícil que un orgulloso obedezca a Dios o a alguien más, así que el orgullo condujo al rey a desobedecer, él nunca pensó que Dios ya tenia a alguien mejor que el listo para reemplazarlo y aunque trato por todos los medios de acabar con David a quien Dios considero como “mejor que Saul” nunca pudo Saul terminar con el escogido de Dios.

David fue todo lo contrario a Saul, David tenía un corazón humilde sin duda no tenía un corazón perfecto, pero si un corazón que se humillaba y reconocía sus pecados y errores. Dios no podrá hacer mucho con nosotros, si como Saul solo tenemos buena pinta de reinar, pero el orgullo la desobediencia y el imperactivismo desenfrenado nos lleva locamente a hacer lo que no debemos, lo que no nos corresponde ni hemos sido llamados a hacer. Pero sin duda si por lo contrario la humildad es nuestra mejor aliada entonces, aunque no tengamos porte de rey, y más bien la única tarea que se nos designe es la que nadie quiere hacer como era el caso de David, entonces, aunque para los ojos humanos y ante nuestros familiares solo demos el ancho para cuidar ovejas, nadie impedirá que Dios diga frente a los famosos y poderosos “yo me he provisto de alguien mejor”.

Dios busca gente obediente y humilde que no se olvide quien es el que lo levanta, cuando olvidamos eso quienes éramos y de donde veníamos ;entonces estamos en peligro de ser reemplazados por alguien mejor, y lo duro no es ser reemplazados por alguien mejor pues eso seria lo genial que cuando alguien se retira sea reemplazado por alguien mejor, lo duro y difícil es; que Dios te tumbe antes de tiempo y te diga en tu cara, hubiera establecido tu llamado hoy y hubieras sido honrado pero hoy te corto y hasta aquí llegaste. Eso es lo triste de esta historia en 1 Samuel 13:13 “Samuel dijo a Saúl: "Has obrado neciamente; no has guardado el mandamiento que el SEÑOR tu Dios te ordenó, pues ahora el SEÑOR hubiera establecido tu reino sobre Israel para siempre.

Pero el hubiera no existe, así que sirve como rey humilde y obediente aunque ahora seas un simple pastor, o si por lo contrario estas en lo mejor de tu servicio cristiano aun así, cuida tu corazón de orgullo y desobediencia pues a Dios no se le hace difícil reemplazar a nadie, así como puede levantar hijos a Abraham de entre las rocas, también puede hacer que las piedras hablen y también le obedezcan y sigan al pie de la letra lo que el quiere que hagamos, asegurémonos en humildad que nuestro reino no sea establecido rápido y temporalmente, si no que aunque nos cueste trabajo y unas cuantas huidas sea para siempre. y eso solo lo aseguraremos obedeciendo en humildad, la obediencia y humildad son nuestros mejores aliados para agradar a Dios y sin duda nuestra mejor adoración y muestra de amor. Bendiciones familia de Dios comparte con alguien y suscríbete para un devocional diario, gracias.

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